lunes, 28 de julio de 2008

Hamburguesa hortero-erótica



Encuesta fulminante...

¿Se le indigestaría a Ud. la hamburguesa?...

viernes, 18 de julio de 2008

sábado, 5 de julio de 2008

Cóndor pasa (encuesta a la derecha)



El cóndor pasa es un obra teatral musical clasificada tradicionalmente como zarzuela, a la cual pertenece la famosa melodía homónima. La música fue compuesta por el compositor peruano Daniel Alomía Robles en 1913 (registrada legalmente en 1933) y la letra, posteriormente, por Julio de La Paz (seudónimo de Julio Baudouin). En el Perú fue declarada Patrimonio Cultural de la Nación en el año 2004.


Transcurría en un asentamiento minero Yapaq de Cerro de Pasco y constituye una obra de denuncia social. Es la tragedia del enfrentamiento de dos razas: la sajona y la india. La explotación de Mr. King, dueño de la mina, llega hasta la venganza de Higinio, que lo asesina. Pero, sustituyéndolo llega Mr. Cup. Habrá que luchar nuevamente, y el cóndor que vuela en las alturas, es el símbolo de la deseada libertad. Inicialmente de origen argentino, El Cóndor Pasa aparecía en la parte final de la obra. Es una cashua (danza similar al huaino) y fue inspirada en los cantos andinos.

Yaw kuntur llaqtay urqupi tiyaq
maymantam qawamuwachkanki,
kuntur, kuntur
apallaway llaqtanchikman, wasinchikman
chay chiri urqupi, kutiytam munani,
kuntur, kuntur.

Qusqu llaqtapim plazachallanpim
suyaykamullaway,
Machu Piqchupi Wayna Piqchupi
purikunanchikpaq.

Armando Robles Godoy, reconocido cineasta peruano e hijo del compositor llegó a la conclusión de que su padre nunca fue un poeta de gran lirismo, eso explicaría porque a pesar de tener una considerable obra Daniel Alomía Robles sólo versificó dos de ellas. Armando no disfrutaba mucho de las diversas versiones de la letra en castellano existentes para la melodía compuesta por su padre así que propuso una letra apoyándose en el trabajo de Paul Simon.

Como a pesar de todo, no está claro de qué pasa el cóndor hemos creado una encuesta para que dejen su opinión, si les apetece. ¡Suerte...!

jueves, 3 de julio de 2008

Donación de órganos


Quiero el día que yo muera
poder donar mis riñones,
mis ojos y mis pulmones;
que se los den a cualquiera,

si hay un paciente que espera
por lo que yo ofrezco aquí
espero que se haga así
para salvar una vida,
si no puedo respirar,
que otro respire por mí.
Donaré mí corazón
para algún pecho cansado
que quiera ser restaurado
y entrar de nuevo en acción;
hago firme donación
y que se cumpla confío
antes de sentirlo frío,
roto, podrido y maltrecho
que lata desde otro pecho
si ya no late en el mío.
La pinga la donaré,
que se la den a un caído
y levante, poseído,
el vigor que disfruté
pero pido que, después,
se la pongan en un jinete,
de esos que les gusta brete;
eso sería gran cosa,
yo descansando en la fosa
y mi pinga dando fuerte.
Entre otras donaciones
me niego a donar la boca
pues hay algo que me choca
por poderosas razones:
sé de quien, en ocasiones,
habla mucha bobería;
mama lo que no debía,
y prefiero que se pierda
antes que algún comemierda
mame con la boca mía.
El culo no lo daré
pues siempre existe un confuso
que pueda darle mal uso
al culo que yo doné;
muchos años lo cuidé
lavándomelo a menudo
para que un cirujano chulo
en dicha transplantación
se lo ponga a un maricón
y muerto, me den por culo.

Atendiendo a mis razones

otra cosa mantendré
y es que me dejen el pelo

por si acaso voy al cielo

y en las celestes regiones

con san Pedro trataré

entre miles de cuestiones

en mantener mis cojones.

Atribuido a CAMILO JOSE CELA. (1916-2002)